A la hora de elegir los textiles del baño existen multitud de tejidos en el mercado, pero no es oro todo lo que reluce. Tanto si tu piel es delicada como si no, es muy conveniente acudir a prendas, en este caso toallas y albornoces, de materiales orgánicos. Y además, las fibras orgánicas son más respetuosas con el medio ambiente, tanto en su cultivo como en el posterior proceso de fabricación. A continuación vamos a enumerar algunos materiales de este tipo.
Fibras naturales, buenas para ti y para la naturaleza
En primer lugar, citar al algodón, aunque hay que recordar que no todo es orgánico. Este último se caracteriza por cultivarse a partir de semillas no modificadas genéticamente y no usar pesticidas en el cultivo. En cuanto al proceso de fabricación, no requiere de productos químicos, lo que beneficia al medio ambiente.
Esto es excelente a la hora de sacar al mercado productos que no causen alergias a los usuarios, muy indicados para bebés. El resultado es un material transpirable, muy suave y que se puede lavar fácilmente y a altas temperaturas. Por otra parte, la descomposición de una prenda fabricada con este algodón es rápida, unos meses, lo que reduce el nivel de residuos.
Otra opción muy natural es el lino. Se trata de una planta que no requiere de pesticidas para su cultivo y que, además, no necesita mucha agua. Es un tejido muy absorbente, quizá incluso más que el algodón, y suave. Unas toallas de lino dan sensación de lujo al cuarto de baño. También las hay mezcla de ambos, lino y algodón. El resultado es fantástico. La única tacha que se le puede poner es que arruga bastante, pero eso tiene fácil solución con un golpe de plancha a buena temperatura. Su proceso de descomposición también es rápido.
El cáñamo es otra fibra a tener en cuenta. Mezclado con algodón, se consigue un estupendo tejido absorbente. Posee propiedades antimoho y antibacterias, tiene larga duración y es un material sostenible y de degradación rápida. Todo son ventajas.
Por último, reseñar el bambú. Este material exótico nos puede parecer más adecuado para fabricar muebles. Nada más lejos de la realidad; solo o combinado con algodón, puede dar lugar a unos estupendos tejidos (es la base del rayón o viscosa). Es una fibra que posee propiedades antibacterianas, lo que la hace ideal para todos, sobre todo para los más pequeños. También es altamente transpirable. Por otra parte, al ser una planta de crecimiento rápido es un recurso que se renueva muy fácilmente.
Usar este tipo de materiales en toallas o albornoces es muy beneficioso para tu salud y para el medio ambiente. Son productos útiles, bonitos y muy interesantes. Además, puedes encontrarlos en varios tipos de tejido: nido de abeja (waffle), felpa, lisos, etc.